La historia de Logroñes arrancó en Febrero de 2006. En ese verano, un nuevo equipo se había armado para levantar el desastre que el viejo equipo llamado Sportivo Homero había hecho en 2005 (había terminado último y con varias goleadas en contra).
Ese verano, tuvo que jugar una Liguilla para poder formar parte de los 11 equipos que pertenecen a la Primera División del CNO. Una vez conseguido ese objetivo, en diciembre de ese mismo año Logroñes se enfrentaba a Finuchos en lo que fue su primera semi final de Copa de Oro. El empate y la ventaja deportiva depositaron al rival en la final y a nuestro equipo en un tristísimo partido por el tercer puesto, que luego quedó en manos de La Crema.
Pero en éste 2009, la historia fue distinta y Logroñes se tomó revancha ya que venció a Finuchos, por 2 a 0, en una de las semi finales de la Copa de Oro y el próximo domingo estará jugando su primera final ante Comu (que venció a La Crema en la otra semi por 1 a 0).
En cuanto al análisis del juego, las cuestiones están directamente relacionadas con la situación en la que se encontraban ambos equipos. Es que Finuchos debía salir a ganar el partido porque la ventaja deportiva estaba a favor de Logroñes. Y así fue que nuestro equipo salió a la cancha para ganar el partido, pero siendo más cauteloso que su rival.
Y todo salió a pedir de Logroñes. Es que en el primer ataque que tuvo a su favor, Rodolfo Perotti recibió un rebote que dió el arquero rival después de un centro y no tuvo más que empujarla. No sin un poco de suspenso. "No me bajaba nunca", dijo el lungo defensor.
Fiel a lo hecho durante todo el año, a partir de ese momento Logroñes plantó bandera y Finuchos llenó el área de centros, pero nunca llegó con claridad o con peligro. Y nuestro equipo volvió a llegar cuando finalizaban los primeros 45 minutos por medio de una jugada individual de Lucio Duhour, pero su remate se fue desviado.
El segundo período fue más accidentado que otra cosa. Y los nervios de ambos conjuntos estaban a flor de piel. Tal es así que a los 10 minutos Duhour vio la segunda amarilla y la posterior roja en Logroñes y unos pocos minutos después el arquero de Finuchos también se tuvo que retirar expulsado.
En cuanto al juego, la situación era similar al primer tiempo. Finuchos atacaba sin demasiada claridad, aunque ahora contó con algunos remates de media distancia que llevaron cierto riesgo. Sin embargo, cada vez que querían entrar, se encontraban con dos centrales que formaron una pared: Sebastián Lucero y Rodolfo Perotti fueron impasables.
Y con la desesperación de Finuchos por tratar de empatar, Logroñes comenzó a sentirse más comodo para salir de contra y fue así que contó con dos mano a mano, pero también fueron desperdiciados. Pero otra vez apareció el eterno goleador para traer tranquilidad. El viejo Nicolás Sylvester sacó un zapatazo de 30 metros que se clavó en el ángulo y el resto todo fue festejo. Solo quedaba esperar a que transcurran los minutos para celebrar el pase a nuestra primera final.
Sin embargo, hubo una perla negra que no dejó festejar el final con total algarabía. Y fue la tonta expulsión de Juan Martín Arce. El "Mágico", uno de los jugadores fundamentales para la creación del juego, reaccionó ante un codazo artero de un defensor rival y vio la roja directa que lo dejará afuera de la final.
El próximo domingo, a las 17 y ante Comu, éste equipo intentará escribir sus primeras páginas doradas. Se sabe que será un encuentro muy difícil, y que siempre fuimos, somos y seremos punto en las apuestas. Pero Logroñes, que sabe de milagros, ahora va por uno más.
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