No fue "Un domingo cualquiera". Fue el domingo en el que finalmente comenzó la etapa más emocionante del campeonato, la que define para que está cada equipo, si para jugar la Copa de Oro y luchar por el campeonato o bien para sufrir en ese flagelo muy poco estímulante que significa la Copa de Plata.
Por suerte para Logroñes la cosa arrancó bien. El triunfo, por 1 a 0, ante Amanecidos resultó ser muy importante para hacer crecer al equipo en confianza y posicionarlo bien en la tabla de cara a lo que se viene. Y lo que se viene es LPJ y Extremadura, dos de los rivales directos en la lucha por entrar a la copa dorada.
Pero antes de esos dos partidos hubo otro que no nos resultó nada fácil de resolver porque Amanecidos ya no es aquel rival debil de otros años y porque además había en el ambiente cierto morbo por los incidentes que ocurrieron en el primer partido del año. Por suerte ambos conjuntos olvidaron aquel episodio y solo jugaron al fútbol.
Y si de fútbol hablamos, fue un encuentro que estuvo partido en tres. Los primeros minutos fueron favorables a Amanecidos ya que salió a presionar bien arriba y pudo ahogar en algunas oportunidades a nuestros defensores. Sin embargo no contaban con chances claras, salvo un remate de media distancia que fue bien despejado por nuestro arquero, Dallacaminá.
La segunda parte del mismo fue favorable a Logroñes. Es que después de esa ráfaga inicial del rival, el equipo pudo hacerce de la pelota, la presión de Amanecidos ya no daba resultado y los espacios comenzaron a aparecer. Aunque ayer los delanteros no estuvieron finos a la hora de definir y las ocaciones se iban dilapidando unas tras otras. Primero Facundo Vázquez, después Franco Jardín y más tarde Juan Martín Arce... todos ellos contaron con una situación clara pero no la pudieron meter.
El segundo tiempo arrancó de la misma manera, con Logroñes monopolizando la pelota, pero sin tener claridad a la hora de definir. Por suerte hubo un momento de inspiración extrema y cuando promediaba la segunda etapa se juntaron Sergio Bessega, Fabián Tamburrano y Gonzalo Urrutia y a puro toque habilitaron al "Negro" para que éste defina con un derechazo cruzado y anote el único gol (muy lindo por cierto) de la tarde.
Y cuando Logroñes convirtió el gol, comenzó la tercera parte del partido. Fue esa en la que Amanecidos reaccionó y nos metió en un arco durante los últimos minutos. Por suerte chocaron siempre con una defensa que estuvo muy segura y no pudieron generar demasiado peligro, más alla de esa sensación de gol que generaban constantemente por estar merodeando nuestra área.
Resumiendo, fue una victoria clave para arrancar bien parados la étapa más importante del campeonato y para encarar con el mejor ánimo los partidos que se nos vienen.
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