Aquel excelente comienzo de temporada, con sendas victorias ante LPJ y Finuchos, dos de los que siempre son candidatos, hacían pensar que el transito de Logroñes en el Torneo Apertura del CNO sería fluido. Pero... siempre hay un pero.
Tras quedar libre en la tercera jornada, llegaron dos derrotas consecutivas, y la última, sufrida hoy ante Extremadura, fue muy dolorosa. Hay diferentes formas de perder un partido y el rival era uno de los buenos exponentes que tiene éste campeonato. Pero la forma en que Logroñes perdió el partido invita a una profunda reflexión sobre cual será el futuro de éste equipo.
Y en éste análisis, la crítica no pasa por el juego en sí ya que el equipo jugó todo el partido con 10 hombres y tras un buen primer tiempo, en el cual Logroñes se fue 1 a 0 arriba, en el segundo el rival puso todo para dar vuelta el marcador y lo logró a cinco minutos del final.
La crítica pasa por el compromiso que no demostraron varios de los jugadores. La prueba cabal está en que la lista de buena fe consta de 25 futbolistas y sólo se pudo juntar 10, dando ventajas durante 90 minutos en una cancha muy fea (aunque no tanto como el Monumental), ante un rival complicado y con una condición climática bastante hostíl.
Se avecinan cambios es el título de ésta nota. Esos cambios estarán en esa lista de buena fe que cuenta con jugadores sin orgullo y que se cagaron en sus compañeros.
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